La ONCE extrema la SEGURIDAD para mantener el “negocio”, mientras descuida el Juego Responsable y a sus vendedores

Es realmente digno de admiración el celo que dice tener la ONCE a la hora de velar por la seguridad de los sorteos, aplicando medidas y estrictos controles siguiendo su normativa en materia de integridad y seguridad en relación a muy distintas cuestiones para mantener el “negocio”. Todo parece estar atado, y bien atado, en alusión tanto a los aspectos técnicos como a lo que respecta al equipo humano. Sin embargo, no podemos dejar de recordar en este punto lo importante que sería demostrar igualmente este escrupuloso cuidado a la hora de diseñar políticas laborales para que sus trabajadores se sintieran mejor tratados, como hemos denunciado tantas y tantas veces. Igualmente, se echa en falta un enfoque de Juego Responsable más acorde con el sentido mismo del término (su estrategia comercial no es precisamente la idónea) y, es fundamental recalcarlo, también una política laboral más respetuosa con sus trabajadores, tal y como reclaman los mismos vendedores y las organizaciones sindicales. Todo ello, en gran contraste con la fantástica pero también poco creíble Memoria de Responsabilidad Corporativa (RSC) 2018 que la Organización hizo pública recientemente, tal y como informamos.

A continuación, les ofrecemos el comunicado íntegro para que puedan contar con más información y así juzgar por ustedes mismos…

Seguridad en los Sorteos de la ONCE

La seguridad es una máxima a tener en cuenta en todos los aspectos de nuestra vida, una garantía para que las cosas funcionen bien, y…, para la ONCE, nuestra vida son sus ‘sorteos’; por eso aplica la máxima seguridad en este ámbito. Porque, el compromiso de la ONCE con la seguridad del área de Juego es incuestionable y ostenta las certificaciones de cumplimiento de los exigentes estándares de seguridad ISO 27001 y WLA-SCS de la Asociación Mundial de Loterías.

Muestra de esta determinación son las importantes medidas que se aplican en los sorteos, estableciendo estrictos controles que se ajustan a las cláusulas de dichas normas en temas de integridad y seguridad de la información, tales como seguridad física y del entorno, clasificación y etiquetado de la información, gestión de los soportes informáticos, seguridad de las comunicaciones, aspectos de seguridad de la información para la gestión de la continuidad del negocio, etc.

Dicho así, parece sonar bastante complejo, pero se simplifica bastante si simplemente explicamos que, para llevar a cabo sus sorteos, se cuenta con todo un equipo humano y material que hace posible que el engranaje completo funcione todos los días puntualmente. Nada se deja al azar; todas las tareas de los miembros del equipo involucrado en el sorteo están protocolizadas, con exhaustividad en su detalle, para evitar o minorar cualquier tipo de contingencia. Tampoco escapan a este control las máquinas y equipos informáticos, cuyo funcionamiento es constantemente revisado y redundado.

Por ejemplo, al pensar en las máquinas nos vienen a la mente los bombos de los sorteos. Veamos algunas de las medidas de seguridad que reúnen:

Para garantizar el correcto funcionamiento de los bombos se pasan exhaustivas revisiones periódicas.

Se dispone de bombos de reserva que sustituirían a los habituales en el caso de que alguno de ellos se estropeara in extremis.

Las bolas de los sorteos se someten, periódicamente y bajo la supervisión de una auditora externa, a control de un perito ajeno a la ONCE, quien certifica ante notario que todas tienen el mismo tamaño, peso y color.

El plató de grabación donde se encuentran ubicados los bombos, la sala donde se custodian los arcones de bolas, los libros de actas y los equipos de medición para realizar los calibrados periódicos y la sala de operaciones informáticas disponen de medidas especiales de seguridad y de acceso.

El detalle y características de las bolas y bombos de los sorteos, así como sus sustituciones, controles internos y externos, están detallados en el protocolo específico, aprobado por el Comité de Seguridad del área de Juego de la ONCE.

Medidas de urgencia

Pero vayamos más allá: ¿qué pasaría de ocurrir una gran catástrofe, como una gran inundación, y que todos los bombos de la Sala de Sorteos quedaran inutilizados, o no se pudiera tener acceso a ellos?

Pues la Dirección General de la ONCE dispone en todo momento de una sala de sorteos alternativa, con todos los medios materiales precisos, a fin de poder realizar alternativamente allí los sorteos en caso de que fuera necesario. Como curiosidad cabe señalar que, al margen de que todo el equipamiento de esta Sala pasa revisiones periódicas, para probar que efectivamente está operativa al 100%, con carácter anual se efectúa una prueba que consiste en el traslado de todo el personal del equipo de sorteo a la sala alternativa, con ejecución de procesos reales para cumplir con el protocolo de continuidad de celebración de los sorteos en caso de emergencia.

Y hablemos ahora de las personas… ¿Se les somete también a medidas de seguridad? Pues por supuesto que sí. A continuación, se explican algunas de las medidas que se aplican sobre el equipo de sorteo, en concreto sobre el personal que compone la Mesa de Sorteo:

Para cada sorteo se solicita, al Colegio de Notarios de la localidad en la que se celebre, la asistencia de un notario. Si se diera la circunstancia de que no acudiera, la Mesa del Sorteo tendrá que facultar la presencia de un testigo en la misma.

El director general de la ONCE designa para cada sorteo un equipo de guardia, que sustituirá a los miembros de la Mesa del Sorteo si fuera preciso por cualquier circunstancia.

Los componentes del equipo suplente o de guardia del sorteo (presidente suplente e interventor/a suplente) deberán tener una disponibilidad de presencia en las instalaciones del plató de una hora desde que reciban la llamada a tal efecto; y en todo caso mantenerse de guardia hasta que hayan finalizado todos los procesos del sorteo. Para verificar este aspecto se realizan pruebas periódicas específicas (llamadas telefónicas y presencia en el estudio de grabación).

Antes de la celebración de los sorteos se realizan pruebas de incidencias posibles y resolución de las mismas por los equipos de sorteo.

Comunicado ONCE