Amadeu, un 10

Que nadie se equivoque. La Matrícula de Honor que Amadeu Farré acaba de obtener en su particular examen sectorial, no ha sido tanto por las modificaciones al disparate reglamentario de 2005, sino más bien por el sinuoso camino que se ha visto obligado a recorrer para que tales modificaciones obtuvieran la bendición del Consejo de Gobierno de la Generalitat. Porque en este tema no se trata de sabiduría política, que la tiene, ni de sentido común, que le sobra, sino más bien de la nueva habilidad de sortear las fronteras interiores que todavía tiene el tripartito en la Administración catalana.

Que nadie se equivoque. La Matrícula de Honor que Amadeu Farré acaba de obtener en su particular examen sectorial, no ha sido tanto por las modificaciones al disparate reglamentario de 2005, sino más bien por el sinuoso camino que se ha visto obligado a recorrer para que tales modificaciones obtuvieran la bendición del Consejo de Gobierno de la Generalitat. Porque en este tema no se trata de sabiduría política, que la tiene, ni de sentido común, que le sobra, sino más bien de la nueva habilidad de sortear las fronteras interiores que todavía tiene el tripartito en la Administración catalana.

Parece increíble, pero es real como la vida misma. Multitud de mandos intermedios continúan en sus puestos jodiendo la marrana y taponando cualquier iniciativa que sirva al interés general de Cataluña. En el caso del Juego, la sombra, o más bien el fantasma, de la Papisa Claramunt todavía tiene recorrido… Pero es sólo cuestión de tiempo, Farré es mucho Farré y el único fantasma que le preocupa es el de la crisis… Y la mejor prueba de lo que digo es el balón de oxigeno que acaba de entregar al Sector en forma de modificaciones reglamentarias.

Pero hay más. Todavía resuenan en mis oídos sus brillantes palabras de bienvenida en el reciente Congreso de Cofar. A este hombre, al que le cabe todo el Sector en la cabeza, no le duelen prendas a la hora de la autocrítica. Con una personalidad refractaria al “corta y pega” , convencido del momento revolucionario que vive el Juego y amante del progreso sectorial, don Amadeu no pudo ser más claro en su primera intervención congresual. “ Tenemos una Ley del Siglo pasado “… “ Hay que cambiar de paradigma “… “Necesitamos nuevas leyes cortas, concretas, conceptuales, que permitan Reglamentos simples, fáciles “…

Y, finalmente, su compromiso de tener al menos un proyecto de Ley antes de finalizar el año. Pero, ojo, no un proyecto de Ley cualquiera pensado por y para Cataluña, sino uno elaborado teniendo en cuenta a los demás territorios del Estado. Porque el señor Farré, que ya ha dado el primer paso para el cambio de paradigma, sabe muy bien lo importantes que son los consensos para el apasionante momento histórico que estamos viviendo. Desde AZAR y AZARplus, nos sentimos muy orgullosos de que quien ostenta el título de Mejor Político del Año 2011, se comporte dando muestras de una dignidad, una profesionalidad y un talento que no podemos por menos que aplaudir con un merecido 10.