Apuntes
A ver, a ver… Que no es una cuestión de culpa…Que por mucho que estrujemos la Mayéutica sectorial, no es posible señalar con el dedo a persona, cosa o institución culpable de nuestros males… Los vientos de confusión y desconcierto generalizado que vivimos en el Juego están indisolublemente unidos en la relación espacio-tiempo…Somos hijos naturales de esas dos magnitudes que, en realidad, son una sola… y de los esquemas, escenarios y paradigmas que la han acompañado en los últimos cincuenta años… Yo propongo hermanar a Parménides con Einstein y transferir sus conocimientos a la Industria del Juego…
A ver, a ver… Que no es una cuestión de culpa…Que por mucho que estrujemos la Mayéutica sectorial, no es posible señalar con el dedo a persona, cosa o institución culpable de nuestros males… Los vientos de confusión y desconcierto generalizado que vivimos en el Juego están indisolublemente unidos en la relación espacio-tiempo…Somos hijos naturales de esas dos magnitudes que, en realidad, son una sola… y de los esquemas, escenarios y paradigmas que la han acompañado en los últimos cincuenta años… Yo propongo hermanar a Parménides con Einstein y transferir sus conocimientos a la Industria del Juego…
“Lo mismo es pensar que ser” dice el presocrático… El espacio y el tiempo no son dos realidades independientes, aseguró la mente más brillante del Siglo XX… Pensar, para ser… en el escenario cambiante del espacio-tiempo que nos ha tocado vivir, digo yo… ¿Y nuestros clientes?… ¿Ofrecemos lo que quieren o lo que quieren es consecuencia de lo que SI ofrecemos, o de lo que NO ofrecemos, o de lo que ofrecen los demás? ¿Se ha modificado la Demanda por los sucesivos impactos tecnológicos? ¿Es todavía válido el Esquema de Juego que se puso en marcha en la España de 1981 con las B a cinco duros?… ¿Hay que evolucionar a otras formas de Juego, tal y como se hizo desde los Boletos en los Bares a las Máquinas Recreativas todavía actuales?
“A peseta, camiseta” y “Ante la duda, la más tetuda”… No cuestiono la sabiduría popular e incluso recomiendo el sano ejercicio de “la cuenta de la vieja”… Ayer me lo recordó Jesús Franco con una calculadora en la mano y una cierta filosofía disruptiva que apela al sentido común… Ya lo dijo en la última Entrega de Premios de la Revista AZAR… “¿En qué ha cambiado el Juego en los últimos 50 años?…”… “En nada. Ha cambiado la tecnología, pero el Juego sigue siendo el mismo” …O sea, el Póquer sigue siendo Póquer sobre un tapete verde o la brillante pantalla de un ordenador…Eso es probablemente cierto, pero la pregunta debe circunscribirse también sobre el destinatario… ¿Es el mismo? ¿Juega igual en el Casino que en su casa? ¿Qué fuerza es la que hace bascular sus preferencias?
Si pudiéramos conseguir curvar y hasta doblar completamente nuestro espacio-tiempo, volveríamos al pasado… La Teoría de la Relatividad dice que eso es posible… La Ciencia nos apoyaría si cerráramos los ojos para retornar a la mágica experiencia del futbolín o el tocadiscos… pero somos humanos víctimas de una vida demasiado corta… Al margen de la nostalgia, sólo nos queda sufrir o disfrutar un presente que evolucionará Sí o Sí hasta convertirse en futuro… Llevamos cincuenta años vendiendo “camisetas a peseta” y manoseando a la Diosa más tetuda del Azar industrial…¿Habrá que volver a los Boletos y a sus quehaceres subyacentes?… La DGOJ dice que sí y nos ha puesto un IPad sobre una mesa, en la que también hay una pistola… A lo mejor tiene razón… Mientras tanto yo no dejo de pensar en el perro de Alcorcón… Sacrificado y muerto en el transcurso de una carrera, en la que el pobre animal no sabía que estaba compitiendo… A ver, a ver, que no es una cuestión de culpa…
Y también “pensar para cerrar”. Más de uno ya lo ha hecho.
Yo si que creo que hay culpas y culpables. Con la vieja historia de no cambiar lo que funciona, pues lo que funciona deja un día de funcionar y te quedas con el culo al aire. Eso es lo que nos está pasando con los bares.
Ortega eres el Rey de la Botica.
¿ Es un piropo o un reproche ?
Es un reconocimiento a su constancia y sus esfuerzos.
No sería malo que algunos entonaran el beato mea culpa, al mismo tiempo que despertaran de su letargo y ser proactivos en lugar de culpar a los demás de sus problemas… los problemas de cada uno hemos de resolverlos cada uno, siempre suele ser así, no esperar que alguien venga a resolverlos.
Y el sector de juego presencial en especial las máquinas en hostelería y locales de juego, tiene un problema, y como siempre ser ha hecho han de aportarse alternativas, el ejemplo de la desaparición de los boletos remplazados por las máquinas B, lo que demuestra que en esos locales hay personas que les gusta jugar, algunos siguen haciéndolo en las máquinas B, otros nuevos se han incorporado con las terminales de apuestas y hay mas gente que entra que no juega a ninguna de estas dos opciones, pero que también jugarían a conceptos, contenidos y en terminales afines a sus gustos.
A este paso, un bingo y un casino por ciudad. Los demás a venderlos y a convertirlos en salas de baile o qué sé yo. Las futuras noticias de la revista serán “Cierra otro bingo, otro casino, otro salón.”.
Está muy bien la “metafora” que hace Ortega sobre el perro de Alcorcón porque es verdad que los operadores estamos metidos en una “carrera” en la que no habíamos pedido participar y no se si acabaremos como ese pobre perro, pero lo que es seguro es que la carrera la van a ganar otros gracias al Gobierno Central y a las Administraciones regionales que nos están dando de lado.
Al número 8: También os están dejando de lado los grandes fabricantes. No han buscado alternativas a la B tradicional, ni quieren que los demás os las ofrezcan.
Querido Ortega es verdad que el ser humano y por lo tanto el consumidor, va a jugar siempre. Pero eso es lo unico que no cambia. El Juego sí que puede cambiar más allá de sus tecnologias y tener otra esencia con el paso del tiempo. Creerse que a las tragaperras siempre se jugará aunque sea con otra tecnologia (online por ejemplo) es como haberse creido que siempre se jugaría al futbolín o al billar aunque fuera sobre una pantalla o una consola. Los museos están llenos de cosas que parecía que iban a ser eternas y ese es el unico viaje que podemos hacer al pasado aunque Einstein soñara con doblar el tiempo hacia atrás o adelante.